La Nueva Era

"Hay señales inconfundibles de que en nuestro tiempo se está produciendo un acontecimiento mitológico-psicológico-histórico importante y extraordinario. Historiadores serios han anunciado el final de una Era, y nuestras incipientes mitologías proclaman el comienzo de otra -la de Acuario-; una Era llena de maravillas y anunciada por portentos. Lo que es seguro es que nuestras viejas dinastías mitológicas, las grandes tradiciones ortodoxas que han guiado y dado forma a la vida de los hombres en este planeta durante miles de años, han empezado a aflojar el dominio que ejercían sobre nuestra imaginación colectiva. Durante la mayor parte de nuestra historia la tendencia mitificadora del hombre ha estado anclada tanto en una proyección literal sobre el paisaje exterior como en formas culturales tradicionales. La primera ancla ya se ha soltado y estamos arrastrando la segunda, azotados por los vientos de cambio".

Stephen Larsen
La Puerta del Chamán

domingo, 21 de diciembre de 2008

COMUNICACIÓN

Un gran aspecto que nos distingue a los seres humanos del resto de los seres biológicos, es el desarrollo del lenguaje oral y escrito. Esto, de ninguna manera, significa que los demás seres vivos no se comuniquen. En síntesis, lo hacen, pero obviando el uso de las palabras como tal.
La palabra es un recurso sorprendente de comunicación, pero por si misma, es limitada, limitada si simplemente valorada por sus atributos racionales y de estética. Es justo el abuso de estos dos factores de los que se valen las grandes campañas publicitarias y políticas para impregnar al espectador de una imagen alusiva e ilusiva, a manera de una inducción hipnótica de las masas.
La palabra emitida es sólo el producto de la liberación de una energía mental, muchas veces, y cardíaca en otras, o entonces el equilibrio y combinación de ambas, la que llega a condensarse de manera verbal o escrita valorando no solamente el significado individual de cada una, sino el contexto que llega a conformar dentro de un conjunto de ellas. Aquí, hay mucho más en juego que una simple combinación de letras que pueden expresar un mero pensamiento o sentimiento.
El más profundo sentido de la palabra está en su emisor, pues la palabra oral y escrita son sobretodo vibración y su fuerza depende únicamente de aquel que las emite. Así, un discurso tendrá significados completamente diferentes si pronunciados por dos personas, sea quien sea. Uno de los discursos puede ser muy positivo y calar hondo, el otro, totalmente idéntico en palabras, puede causar mala impresión. La consistencia y verdadera expresión de las frases depende exclusivamente de aquella entidad que impregna su propia energía y densidad en ellas. Es esa misma energía la que recibimos al escucharlas y leerlas.
Hay un factor sonoro que es indudablemente esencial en la emisión de un conjunto de palabras. Muchas veces, éstas son sólo el complemento de un talentoso mensajero de conocimiento e ideas. Aquí, la sonoridad vibratoria de las palabras es un elemento sin parangón. Son estos inapreciables y sutiles decibeles los que posibilitan destrabar las férreas auto-defensas mentales de una persona para colocarla ante una verdad imperceptible, de otra manera. No es por nada, que en las sociedades antiguas las historias eran pasadas de una generación a otra a través de la palabra oral. Grandes sabios y oradores como Sócrates o Jesús reunían grandes multitudes y nunca dejaron sus enseñanzas de forma escrita.
La capacidad de percibir la verdad a través de las vibraciones sonoras es propia de todo ser vivo. Tanto el reino vegetal como animal son afectados por esta cuestión. En el reino animal, es donde esto toma tonos mucho más altos, pues animales de todas las especies usan las frecuencias de sonido para comunicar sus necesidades a los individuos de su misma especie, así como para distinguir los peligros que les acechan. Las serpientes perciben los movimientos de sus presas con tan solo el movimiento oscilatorio de sus lenguas, las que captan las ondas vibratorias que repercuten en su medioambiente. Las ballenas escuchan el llamado de su pareja para aparearse a miles de kilometros en los océanos. Las aves migran de un continente al otro guiándose por pequeños impulsos electromagnéticos generados por la Tierra, dependiendo la estación del año. Los perros huelen el peligro, percibiendo los feromonios que suelta una persona.
Las palabras, pues, en las sociedades que hemos construido, son ciertamente importantes. Sin embargo, como mamíferos únicos que hacemos parte del reino terrestre, tenemos la capacidad de sondar ese instinto intuitivo que nos habilita a comunicarnos sin restricciones con nuestros semejantes, a la vez que con nuestro medio ambiente y de modo impensable. Evitar hacerlo, es esconderse de la verdad, es aceptar el embuste o ser partícipe de ello cuando sucede.
Como seres humanos, el uso de la palabra es de máxima responsabilidad y, sobretodo, un ejercicio permanente de equilibrio. Sólo así, llegaremos a ser plenos regentes de este planeta y usufructuar por completo el regalo de la vida en abundancia.

viernes, 10 de octubre de 2008

CAMBIOS MAGNÉTICOS

Las transformaciones por las que atraviesa nuestra Tierra se proyectan en todas las naciones que sostiene. Los cambios no son simplemente climáticos, geológicos y físicos en general, se adentran también en los contextos culturales, sociales, filosóficos, políticos y económicos de los pueblos; se reflejan incluso en mudanzas de índole fisiológico y perceptivo de las personas. Estas transmutaciones siempre han sido una constante a lo largo del tiempo. La diferencia actual radica en la aceleración de estos procesos a nivel global.

Cuando hablamos de cuerpos pequeños y grandes, hacemos también referencia implícita de todas sus partes diminutas e ínfimas que los constituyen, de sus cargas atómicas y de los intercambios electromagnéticos y electroquímicos que se establecen dentro y fuera de los elementos energéticos que construyen nuestro entorno y escenarios del día a día.

Estas cargas y fuerzas electromagnéticas están por todas partes del universo. Están fuera y dentro de nosotros mismos. Por tal motivo, toda interacción entre cuerpos causa inevitablemente dinámicas variadas en sus movimientos y accionar, todo siendo conducido por frecuencias magnéticas de toda intensidad. Por consiguiente, todos los cuerpos en su escala más amplia (rocas, plantas, animales y personas) contienen sus propios campos electromagnéticos. Esto no es una novedad; lo que tal vez lo sea para muchos, es la forma cómo estas energías son colocadas en movimiento a través de los cuerpos, pudiendo la propia acción moldear y modular la intensidad de estos campos electromagnéticos y sus influencias.

Así, una acción, un movimiento inesperado, una interacción con otros cuerpos y, yendo más lejos, un pensamiento, un deseo o una palabra son representaciones electromagnéticas puestas en marcha por su emisor -en estos casos específicos, nos referimos a personas-. Las personas somos entonces canales energéticos de fuerzas cósmicas muy grandes, las que consciente e inconscientemente ejecutamos a diario a través de padrones comportamentales, emocionales y psíquicos.

El ser humano es una herramienta cósmica de todas sus fuerzas y, como tal, es capaz de influir energéticamente todo su entorno, así como ser influenciado recíprocamente por éste.

Cada cierto tiempo, aparecen grandes cambios electromagnéticos, tanto en el cosmos como en el plano terrestre. Oscilaciones súbitas del electromagnetismo solar llegan a afectar todo el ecosistema planetario. La propia rotación terrestre no es completamente estable y cada cierto periodo, ésta puede cambiar su rotación, grado de inclinación con respecto al Sol e incluso su revolución sobre su propio eje.

Toda esta grandiosa dinámica cósmica y terrestre produce mudanzas electroquímicas en los seres vivos que habitan el planeta, creándose ciclos intermitentes dentro y fuera de la corteza del planeta. Estos ciclos vitales son los que han ido moldeando la evolución de este mundo y sus criaturas para que lleguemos a estar donde estamos en este momento.

A través de grandes cataclismos, grandes especies de animales como los dinosaurios tuvieron que desaparecer, para dar paso a otras, hasta el advenimiento del ser humano como lo conocemos en la actualidad. Así, también, de tiempos en tiempos, cambios climáticos y geológicos van apareciendo para transformar no sólo el habitat físico de hombres y mujeres, pero de manera mucho más poderosa su habitat psíquico.

Mucho se está hablando del sobrecalentamiento terrestre. Este tipo de cambios climáticos siempre ha constado en la historia terrestre, incluso desde mucho antes de la aparición del hombre sobre la tierra. Se dice que el hombre tiene mucho que ver con este factor climático. En cierto sentido sí, aunque sólo para acelerar un proceso natural que tarde o temprano acabaría sucediendo de cualquier forma, pues hace parte de los ciclos terrestres, ciclos igualmente determinados por las grandes corrientes marinas.

todo este fantástico y complejo juego, muy bien diseñado por la Ingeniería Cósmica no ha sido dejado al azar, ni depende de elementos casuales. Es, por consiguiente, un proyecto magistral para el desenvolvimiento de la conciencia, donde cada partícula y evento colabora hacia su expansión. Con todo esto, entenderemos mejor el siguiente punto, que tiene que ver con toda esa realidad inmediata que nos rodea.

Si hay algo que ha comenzado a marcar esta primera década del nuevo milenio, es la gran agresividad de las tempestades, ciclones, sismos y no sólo sus intensidades, sino sus frecuencias, pudiendo aparecer a cualquier hora y lugar. Claro, hay zonas normalmente proclives a estos fenómenos, pero éstos están manifestándose en sitios donde eran raros o inexistentes.

Lo que está caracterizando nuestra contemporaneidad son cada vez más las situaciones inesperadas e inusitadas -pasándonos ya un poco al ámbito de los quehaceres humanos-, pues no podemos desvincular las ocurrencias físicas y climáticas del planeta con las actividades de las poblaciones mundiales, ya que si hay un atributo que es común a todas sus partes, ésa es la reciprocidad entre todas las piezas en juego.

Para continuar con esto, me remonto al siglo XX, al año de 1989, año que destaca la caída del muro de Berlín, como también la de todo un sistema fallido de la política y de la economía de los pueblos. Podemos observar aquello como un gran símbolo físico de la conciencia humana, uno que ya nos daba indicios sobre otras caídas subsecuentes, inesperadas e inusitadas que se irían presentando.

La caída de las bolsas y de los sistemas financieros hace parte de este proceso, un sistema que sentó sus bases sobre una alta especulación y números virtuales. En otras palabras, esto representa el desplome de una exacerbada ansiedad de lucro y de un mal empleo del capital mundial. La economía representa el fluido vital que alimenta los pueblos. Y, es obvio, que si está contaminado, acabará dañando la conciencia de los mismos. La depuración de "la sangre" es esencial para que el cuerpo y sobretodo el espíritu de las naciones alcance un nivel óptimo de salud, limpiándose de los parásitos y toxinas que le impiden alcanzar una salud mucho más íntegra.

Las tempestades continúan.

A esto vamos añadiendo otros factores, a tipo de obstáculos, que paulaatinamente están cayendo, pues es necesario para que este cuerpo llamado humanidad consiga recuperarse de su adormecimiento, un bello cuerpo que va despertando, paso a paso, a jalones por veces.

El colapso del poder, como se ha distinguido a lo largo de miles de años humanos, es otro de los puntos fundamentales de desestructuración. Es algo que está siendo trabajado de muchas formas, en muchas naciones del orbe. El fundamentalismo, en sus diferentes facetas, no es más que un acto desesperado para impedir un cambio inminente, es el miedo, por no decir pavor, por lo nuevo. Por veces, aparece una especie de dolencia terminal reflejada en una cierta nostalgia por épocas milenarias, por la vuelta a doctrinas y regímenes obsoletos y caducos, algo que, en si, los terremotos y las tormentas de la vida se encargan de transformar. Vivimos tiempos inusitados y muchas cosas no son lo que realmente aparentan ser.

Los engaños y la fuerza bruta, incluso las más rebuscadas artimañas del poder tienden a ser ineficaces ante un pueblo que gana día a día más conciencia de si mismo. La verdad se torna más que evidente. Así, gobernantes abusivos, mal intencionados, ególatras y corruptos van cayendo de las más diversas formas, cada forma siendo un reflejo directo de sus propias armadillas y acciones.

Vivimos tiempos muy especiales, tiempos de gran integración con todas las partes, las que estamos aprendiendo a respetar y venerar por separado y también en su conjunto como un todo. Así como estamos vivenciando una era de integración, es una igualmente de gran responsabilidad, pues cada ser humano va descubriendo que tiene muchísimo que ver con todo y con absolutamente todos.

lunes, 22 de septiembre de 2008

AROMA Y SON

La ignorancia humana siempre ha tratado de imponer sus propias leyes mentales e intelectuales. Muchos intentan obviar el mecanismo normal y natural del sistema vital que todo lo rodea. La testarudez humana es tan grande que intenta imponer sus razones al propio sistema natural de la vida y sus procesos. El resultado obviamente siempre ha sido por demás crítico y menguado, a no ser por el reconocimiento de las limitaciones mentales de los hombres y de las mujeres para solucionar sus propios conflictos. Llegar a reconocer que el ser humano está limitado por su mente es un proceso importante para que podamos trascender como humanos.
Muchos han colocado la mente como un objeto de culto. No es por acaso que en el mercado hayan cientos de libros sobre el tema, de cómo ser capaces de expandir la mente y de cómo dominarla. Por cierto, la mente parece haberse salido de control y, por consiguiente, hay que recurrir a su dominio y domesticación. La mente es un instrumento invalorable del ser humano, no un organismo gigante, separado de él, que inclusive algunos nos pasan la impresión que ha tomado control de este mundo y poco podemos hacer para detenerla.
La construcción de un mundo mental ha sido la base de la civilización moderna, alimentada por un poderoso combustible: el pensamiento. El pensamiento es un recurso magnífico del ser humano que bien conducido sólo nos ofrece verdad y sabiduría. El pensamiento tergiversado, por otro lado, es un arma de doble filo que lo único que hace es perder a la persona dentro de los laberintos de la mente. No es por nada que podemos relacionar mente con mentir, palabras que contienen una cierta similitud en su estructura ortográfica latina. Ciertamente que la mente hace un gran trabajo mediante su manifestación ambigua o dual, pues la mente si no es bien utilizada, se pierde en la dicotomía del propio órgano que le sirve de canal: el cerebro humano, dividido en dos hemisferios y limitado por la cavidad craneal. El intelecto humano le ha dado a la mente facultades orgánicas y en sociedades donde el organicismo se ha hecho tan importante, esta visión ha permanecido hasta ahora.
Pareciera que no lo hemos hecho tan bien a lo largo de la historia. Bueno, hemos conseguido sobrevivir como especie y para continuar en esa ruta, muchos redundarán en la importancia de expandir mucho más las capacidades mentales del ser humano. Estamos en ese camino y a veces hay la sensación de que las cosas se están poniento un tanto confusas, fuera de control.
Tal vez sea la hora de detenernos un poco y admitir que nuestra mente humana es una herramienta fantástica, pero que por si sola no sacará a la humanidad de los desvaríos que le hemos "permitido" crear. Y si nos referimos a ignorancia humana, ha sido por la voluntad férrea que hombres y mujeres han colocado en omitir o ignorar otros elementos que igualmente entran en juego. La mente es sólo uno de los tantos.
El aprendizaje es individual y colectivo y cada situación que creamos como humanos ya contiene las propias llaves que abrirán las puertas hacia el próximo nivel del juego que vivimos. Observemos detenidamente nuestro alrededor y escuchemos todos los símbolos y voces que esta vida nos ofrece a cada segundo. Algunas voces hablan muy fuerte, pero tengamos cuidado, pues en muchas instancias, esas vociferaciones y ruidos estridentes provienen de la mente humana, y su intención es distraernos, desconcentrarnos de los agradables aromas y de los armónicos sones que el Cosmos y la Tierra nos regalan a diario.

lunes, 15 de septiembre de 2008

NUESTRA RELIQUIA

Cargamos dentro de nosotros todo un linaje de experiencias, pensamientos, deseos y tendencias de tiempos inmemoriables. Somos en síntesis una extensión, no simplemente genética, sino psíquica y espiritual con lo que suponemos nuestro pasado. Digo suponemos, porque todo ese "pasado" se encuentra plenamente "presente" en las células, en la sangre, en los huesos, en la carne, en los genes.

Yo soy la condensación de todos los actos y pensamientos pasados de mis antecesores, una versión actual de sus ideales y esperanzas. Por lo tanto, cada ser humano es una enciclopedia viviente, una entidad rica, espléndida y viva, cargada de experiencias de toda índole.

El conocimiento se encuentra presente en cada uno, pero para eso hay que encontrar el acceso. El presente nos otorga esa oportunidad, la chance de conectarnos en pleno con todo aquello que ya hemos sido y hecho, pues lo hemos sido y hecho a través de nuestros ancestros. El presente es entonces esa época donde tenemos la alternativa de no sólo curarnos a nosotros como personas, pero lo más trascendental es esa chance de poder curar a todos aquellos que vinieron antes. Así, en cada uno reposa la fantástica oportunidad de sanar el pasado, la historia.

Sería infame e injusto decir que somos una víctima genética de nuestros antepasados. Todo lo contrario, somos el cúlmen de todos sus intentos y, sobretodo, sus magníficos aciertos. En otras palabras, digo, todos ellos han vivido a través de los siglos para que "yo" me hiciera presente en este "presente". Es por eso, que cada uno, cada ser humano, es un emprendimiento magistral de la historia, de la vida.

No se puede ignorar simplisticamente todo ese bagaje que toda persona guarda dentro de si, hacerlo es ignorar la historia, ignorar el sacrificio hecho por nuestros antepasados, para que podamos estar aquí, ahora. Ellos en muchas ocasiones erraron, para que nosotros ya no tengamos que hacerlo a través del discernimiento y el conocimiento intrínseco que ello conlleva.

domingo, 31 de agosto de 2008

Luz y Amor

La claridad que está llegando al planeta es cada vez más evidente para todos. Esa luz ilumina toda la casa y permite a sus moradores ver los muchos nudos que fueron atados a lo largo de miles de años de historia humana. No es por nada que estos nudos estén comenzando a ser desatados, poco a poco; en algunos casos, de forma drástica. No hay cómo evitarlo.
Surge una necesidad imperiosa de resolver todo lo pendiente, de todas esas cuestiones reprimidas, omitidas, escondidas, dejadas de lado. Es el tiempo de las decisiones, de las decisiones y cura del alma.
La vida es un concierto de energías sublimes, canalizadas y expresadas en variantes inimaginables de formas, tamaños y colores. No se la puede subastar, hipotecar, confinar o controlar. Estos nudos del control se están desvencijando. Está sucediendo alrededor del globo, en los más variados grados y maneras. Pero es a medida que esto surge, que aquellas fuerzas y canales que han venido maniobrando desde las sombras, reaparecen también con gran fuerza, pues comienzan a reducirse los reductos oscuros para poder refugiarse. Estas fuerzas no son desconocidas. Para manifestarse en el medio, deben salir primero del espíritu que los alimenta. Tampoco es un acaso que en su lucha por sobrevivir, arremetan con ímpetu contra esta mudanza trascendental de la perspectiva humana. Así, vemos un recrudecimiento del beligerantismo y la violencia, del intento de resurgimiento de viejas y obsoletas formas de pensar y actuar, del restablecimiento de antiguas tácticas y doctrinas de visión y poder, pues estas energías fluctúan dentro de las frecuencias del miedo.
La luz y su correspondiente claridad están manifestando en la conciencia global una nueva premisa de equilibrio, paz y libertad. Son cada vez más los que exigen con determinación, no sólo de los gobernantes, sino de si mismos, un profundo respeto a la verdad y una gran responsabilidad en las palabras y actos, tanto propios como ajenos. Es imposible alcanzar un equilibrio dentro del entorno, si todos aquellos dilemas internos no son arreglados dentro de cada uno, a su debido momento.
Es sí importante recordar que el miedo sólo desea estimular más miedo y desconfianza, pues es sólo allí que estas fuerzas consiguen alimento. Y algo que la luz nos trae, es el conocimiento intuitivo de ese gran poder que hace frente a cualquier miedo: La Fuerza del Corazón, resumida en una sola y valiente palabra: Amor.

Por la paz


Guillermo Vega ya recorrió 6.000 kilómetros por la paz.
Incansable. Gasta un par de zapatos cada 1.000 kilómetros recorridos.
Salió de Colombia el 25 de septiembre del año pasado y ha recorrido casi 6.000 kilómetros pidiendo que las personas que agreden, que insultan y que agravian cambien su actitud belicosa por una más dispuesta al diálogo.
Guillermo Vega Cortez ronda los 45 años. Fue árbitro y conductor de buses en su país. Su esposa y sus tres hijos pensaban que su proyecto era una locura, pero ahora, su mensaje es compartido por cientos de personas en los países por donde ha pasado: Perú, Ecuador y ahora, en un momento muy necesario, Bolivia. Su meta es visitar Paraguay, Brasil, Uruguay, Argentina, Chile y retornar a su país después de recorrer 17.000 kilómetros a pie.
“Mi decisión busca que la gente adopte posiciones de conciliación, tolerancia y respeto. Sin odios, sin rencores”, dice. Es un mensaje sencillo, pero difícil de practicar si no se tiene una fuerte motivación espiritual. Guillermo Vega la tiene. Dios lo acompaña en las largas horas de caminata y, a veces, de enfermedad. En Ecuador tomó agua sin tratar y estuvo 15 días caminando enfermo. Cada día recorre casi 30 kilómetros, en jornadas de 8 a 12 horas, aunque a veces debe caminar 14 horas. Lleva una bandera blanca en la que se lee “Caminante por la paz sin fronteras de Colombia y Sudamérica”.
Ha gastado seis pares de zapatos y quiere renovarlos en Santa Cruz, porque los que tiene son muy calientes. Ha aprendido que, en lugar de poner almohadillas a la plantilla, es mejor usar hasta cuatro pares de medias para amortiguar los pasos. La clave para evitar las ampollas es ajustar bien el calzado. Si las fuerzas lo acompañan, le gustaría romper el récord Guinnes, de 30.500 kilómetros recorridos a pie.
reportaje de Javier Méndez.

domingo, 27 de julio de 2008

Revelación

Son muchas las cosas que pasan por la cabeza. Mis otras partes llegan a funcionar como filtros que van interpretando los pedazos de información que van llegando; llegan de las más variadas fuentes, muchas hasta externas -son en esas situaciones que los filtros hacen un trabajo ejemplar-, otras del éter, de la estratósfera o de regiones desconocidas del mundo físico, quizá de los umbrales metafísicos... De cualquier forma, las palabras comienzan a formar frases y los sentidos que construyen son de los más diversos, dependiendo del lector.

Hay algo que ha estado arremetiendo con cierta fuerza en mi conciencia y tal vez tenga que ver -bien, siempre tiene que ver- con el SER. No puedo desligarme de ello. Todo rodea al ser, todo tiene que ver con Ser, el fantástico SER HUMANO. Y si decidí armar un blog personal fue sólo con la intención de escribir todos esos interludios a su respecto. A más de uno le salta de la mente el horror de ver al humano como un ente capaz de sobrepasar las sórdidas experiencias por la que se ve obligado a transcurrir en vida, peor que eso, el horror que muchas veces ha sido y es capaz de infringir a sus congéneres. Y es que muchos parecen haber nacido con el objetivo de crear dolor y molestias. No será también que han venido para hacernos recuerdo de todo ello que nos daña, que nos agrede y que ya no deseamos más en nuestro presente y futuro? Y como la memoria humana parece diluirse constantemente en el olvido, aparecen seguido todas estas espinas dolorosas que la humanidad a lo largo de su historia, ha debido soportar. La experiencia humana es aprendizaje, cada uno cumpliendo un papel precioso en este juego colectivo.
Imaginarnos como piezas separadas ha constituido por buen tiempo el ropaje que hemos adoptado, pues cada acto es conocimiento. Es una constante para muchos colocarse el difraz de víctima, de verdugo y tantas otras interpretaciones. No cabe duda que son muchas. Tal vez sea por eso que los dioses humanos hayan decidido beber del cáliz del olvido. No sería posible para Dios jugar tantos juegos extraños, siendo tan consciente de si mismo. Pero tampoco hay porque iludirse, pues eso, de ninguna manera, le quita responsabilidades sobre sus actos. Todo viene a su hora y el ser humano, poco a poco, va recordando el linaje divino que carga inevitablemente dentro. En primeras instancias llega a ser desgarrador, asustador, indescriptiblemente aterrador. Sin duda, puede llegar a serlo; descubrir la iridiscencia personal a tal punto de iluminar un aposento repleto de figuras ocuras, viciadas y deformadas es algo que evitamos ver a diario. Vemos de pronto los "parásitos" que fuimos alimentando en nuestro interior por muchísimo tiempo. Esos "parásitos" tienen nombre, pues provienen de nuestros propios odios, culpas, traumas, palabras hirientes que arrojamos al mundo y los rostros de todos aquellos que de alguna forma herimos, queriendo o no.
Les digo y lo volveré a decir hasta el cansancio, estamos en una época reveladora. Y no es de eso acaso que trata la tal de "Revelación"? Revelarnos la verdad a nuestro respecto como seres humanos divinos? Qué revelación más fantástica!

Algunos dirán, pues sí, estamos viviendo tiempos críticos y grises. A lo largo de la historia, las circunstancias externas no han sido nunca de las más favorables para todos. Es obvio, que cada uno aporta muchísimo con su propio trabajo, con su propio carisma, pero mientras nos mantengamos firmes y centrados en aquella llama viva que guardamos en el pecho como miembros divinos de esta gran familia humana, sabremos que las circunstancias pasajeras del mundo son sólo eso: pasajeras; y que, paso a paso, con nuestra dedicación, nuestra motivación y nuestra intención, poderosa intención, estaremos iluminando nuestros propios caminos. Es también en momentos críticos que vamos descubriendo a tantos otros actores magníficos que aparecen para darnos una mano o el apoyo que en su momento precisamos, o simplemente para saber quién es quien.

viernes, 13 de junio de 2008

Juntando las Piezas


Todo va encajando poco a poco, pues el juego de la vida es un precioso rompecabezas, cuyas dimensiones rebasan el entendimiento humano. Nuestras mentes poco llegan a aprehenderlo. Tampoco es una cuestión de comprensión, es sí una de completa expresión, donde está en juego toda una gama de brillantes recursos mentales, intuitivos, instintivos, emocionales, personales y otros aún no descritos por la palabra. Incontables veces, cada uno de estos elementos transcurre de manera solitaria y aislada en las vidas de las personas. Son características en apariencia inconexas entre una y otra, empleadas de forma prejuiciosa y hasta desconfiada a veces. Quizá sean por estas circunstancias que los resultados pueden llegar a ser menguados en las vidas de las personas. Las respuestas y los frutos personales varias veces acaban siendo relativos, fuera de tiempo y carentes de resultados satisfactorios individualmente o dentro del grupo social, pues los datos suministrados por el macrosistema que nos rodea, suelen ser normalmente ignorados y dejados de lado. Los datos que ese sistema vital nos envía, no son los mismos que atribuimos a las doctrinas y formas de creencias que hemos asumido a nuestro alrededor. La ambición, la rigidez y los temores recrean en la mente de los individuos, padrones a los que llegan a sujetarse fielmente para sobrevivir dentro del microsistema creado. El sistema vital, por otro lado, es altamente comunicativo y esa comunicación se da de múltiples formas, dependiendo de la persona. No existe un único código, sino que todos los que existen se adaptan a cada ser humano en este sistema. Nadie es ignorado. Por el contrario, cuando la testarudez humana se agrava y no reconoce ninguno de los símbolos comunicacionales que el sistema vital envía, así es que ciertos mecanismos son creados por la misma conciencia para poder taladrar los escudos de la “ignorancia”. La ignorancia no es más que una actitud construida para “ignorar” los altavoces de la mente y el corazón, que alineados, crean juntos el camino hacia la sincronización, capaz de entregarnos la solución en cualquier aspecto de nuestras vidas. Para esto, es necesario vislumbrar un cuadro que abrace y no ignore todos los recursos que dispone el ser humano, recursos ricos y sabios. Es a esto que denominamos básicamente una comunicación con el espíritu, un tipo de comunicación que incluye una lectura integral de todas las partes de uno mismo. Y ninguna de estas partes debe ser temida, pues todas ellas poseen un conocimiento propio por separado, no obstante, se complementan perfectamente. Alma, corazón, mente, instinto, intuición, cuerpo, alimentación, entorno, relaciones y otras más componen nuestro ser. Son herramientas capaces de traer la luz, la cura y el equilibrio a nuestras vidas, pues son instrumentos divinos. Decir que el ser humano es un ser oscuro es sólo ignorar el propio brillo, un brillo que reclama a gritos, a cada instante de nuestras vidas, salir a la superficie.




miércoles, 11 de junio de 2008

Un regalo de Dios

Lali, en brazos de su madre. Sushma.

SAINI SUNPURA, India AP.- Una bebé con dos caras nacida en una población del norte de India es venerada como la reencarnación de una diosa hindú. Lali, la bebe, tiene una condición extremadamente rara, llamada duplicación craneofacial, en la que una sola cabeza tiene dos caras. Todos los rasgos de Lali son dobles excepto sus orejas -sólo tiene dos. Por lo demás, tiene dos narices, dos pares de labios y cuatro ojos.
"Mi hija está bien, como cualquier otro niño", dijo Vinod Singh, un agricultor pobre de 23 años.
Lali ha causado sensación en el pueblo de Saini Sunpura, a 40 kilómetros (25 millas) de Nueva Delhi. Cuando salió del hospital el 11 de marzo, ocho horas después de un nacimiento normal, fue rodeada por los agricultores, dijo Sabir Ali, director del Hospital de Saifi. "Toma leche con sus dos bocas y abre y cierra sus cuatro ojos al mismo tiempo", dijo.
La parte rural de india es profundamente supersticiosa, y la niña es considerada la reencarnación de Durga, la diosa hindú de la valentía, una deidad briosa representada tradicionalmente con tres ojos y muchos brazos.
Cerca de 100 personas han visitado a Lali en su casa diariamente para tocar sus pies como muestra de respeto. Algunas ofrecen dinero y reciben bendiciones, declaró Vinod Singh a The Associated Press.
"Es la reencarnación de una diosa", dijo Lakhi Chand, un agricultor de 65 años que fue a visitar a Lali desde el estado de Haryana.
"Lali es un regalo de dios para nosotros", señaló Jaipal Singh, un miembro del ayuntamiento local. "Ha traído fama a nuestro pueblo".
El jefe del ayuntamiento Daulat Ram dijo que planeaba construir un templo a la diosa Durga en el pueblo. "Estoy solicitando dinero al gobierno del estado para construir un templo y ayudar a los padres con el cuidado de su hija", señaló.
La condición de Lali lleva a serias complicaciones de salud, pero el doctor Sabir Ali dijo que la niña se encontraba bien.

miércoles, 4 de junio de 2008

De los mundos internos y externos

Desde temprano, el ser humano evidencia que muchas cosas que ve y percibe aparentemente no se ajustan a su realidad interna. En si, desde temprano, él va descubriendo el paradigma de una realidad interna, como tal, algo que en su mayoría es adoptado como una representación separada de aquella realidad externa que se percibe con los censores fisiológicos y que todos cargamos en nuestros cuerpos. Es hasta frecuente, a medida que el ser biológico se va desarrollando cronológicamente, desenvolver nociones extremas tanto de la percepción interna como externa. Así, aparecen los que se encierran en su propio mundo interno, como una oposición a un exterior que se aprecia de forma distante e irreal. En contraposición, los que asumen la realidad externa como siendo única y completamente verdadera, tienden a separarse de aquella realidad interna a la que catalogarán de irreal y subjetiva. Los humanos, en un contexto general, transcurren sus vidas recorriendo estos dos extremos, discutiendo sobre qué parte tiene la razón, y considerando estos dos mundos como separados y contradictorios. Y si el tiempo pasa, lo hace como un mecanismo integral de ayuda, para que el humano tenga un marco de contraste y referencia entre las diferentes realidades que va creando de manera lineal a lo largo de su vida. Este marco de comparación es fundamental para poder establecer un equilibrio entre las diferentes realidades creadas, pues tanto la realidad interna como la externa son plenamente válidas. Por lo tanto, un entendimiento mejor de su mecanismo funcional puede ayudar al usuario a resolver sus propios dilemas en este juicio. Es hasta normal encontrar la noción paradoxal del caos externo, de la anarquía social, política, económica, porque no decirlo, natural. Y si tanto se reclama en este sentido es porque todo ello escapa de la comodidad que un supuesto control pueda aportar a una conciencia guiada meramente por el escrúpulo de una razón pura y lógica. Es así, que los sistemas son creados; y a medida que la razón llega a crecer, consecuentemente lo hace también su sistema de control, estrechando el cerco de la libre acción. Es esta libre acción a la que se teme y acusa permanentemente de conectarse con otros niveles de conocimiento que escapan de la mera percepción externa y mecánica. Es la que permite asimismo la búsqueda de respuestas en las manifestaciones de la naturaleza, como un mecanismo reflejo del mundo interior. No es por nada que esta paradoja entre el mundo externo e interno haya migrado hacia otras esferas que en la actualidad abarcan el mundo tecnológico e industrializado, los que van asfixiando y devorando la naturaleza, una metáfora válida de la lucha de las realidades internas y externas en este planeta. Y si se observa la historia humana, pareciera que la lógica de la “civilización” ha girado alrededor del esfuerzo descomunal para aplacar las conexiones naturales del ser humano con sus partes subjetivas, una lucha, hasta cierto punto, cruenta desde los moldes físicos. Las culturas ancestrales, tribales e indígenas, así como la mujer, en general, siempre han tenido una extensión muy rica y vibrante con los niveles naturales y subjetivos. No es por nada, que la “civilización” siempre se haya esmerado en su sumisión y “evangelización” histórica. Toda esta cultura de la “sumisión” toma matices mucho más densos con la entrada de otras armadillas modernas, que intentan siempre sujetar al ser humano a un estado de temor y dependencia completa a los factores externos, restringiendo su frontera mental a condiciones muy limitadas. La pérdida de esperanza y el oscurecimiento de la auto-percepción crean en el ser humano dificultades que en apariencia escapan de su dominio. Esta programación continua hecha a lo largo de la civilización, con relación a la imagen del ser humano sobre la faz de la Tierra, ha hecho que éste olvide el significado literal de su existencia, exactamente descrita en el Génesis bíblico: “...hecho a la imagen de Dios”. Esta definición permanece escondida muy dentro de los meandros de la conciencia y el corazón, convirtiéndose por lo tanto, para la gran mayoría, en una idea poética y muy subjetiva, a diferencia de la realidad externa y objetiva que es mostrada implacablemente a diario. La historia lo demuestra, lo dicen muchos a menudo. La percepción tergiversada de ver el mundo interno como uno que no encaja dentro de los confines tridimensionales a los que estamos acostumbrados día a día, es en sí una treta muy sagaz para intentar convencernos de las supuestas evidencias y leyes ineludibles que conforman todo nuestro mundo físico; y viceversa. No se puede entender tampoco el mundo interno sin una comparación directa con su complemento más próximo: el mundo externo. Un conocimiento interno profundo es importante para comprender que aquel complemento externo no es más que una extensión de si, y no una realidad contraria que intenta sobreponerse a la otra. De cierto, existen aquellos que disponen de una plena conciencia de todos estos factores actuando conjuntamente, muy conscientes también del valor y poder pleno del mundo subjetivo. Sin embargo, para varios de éstos, esta validez interna en manos de otros, llega a ser vista como una amenaza a las estructuras implantadas en el mundo externo, por eso, la lucha por menospreciar y aplacar su campo de acción ha sido ardua en muchas áreas del quehacer humano. Los atributos del espíritu, sus conexiones con los estratos más sublimes y sagrados, así como las libertades plenas del alma, proceden de este mundo interior. Muchas cosas que hoy día pululan a diestra y siniestra a nuestro alrededor parecen empujar al ser humano a claudicar de las riquezas de su espíritu y su corazón, o sea, de su mundo interno. Todo Iniciado y Maestro alguna vez debe pasar por este examen, uno que pruebe que su fuerza, paz y regocijo personales provienen plenamente de su interior y no están al alcance de los artilugios externos que su propia mente sea capaz de disparar. En ese sentido la metáfora del Cristo, siendo seducido por “Lucifer”, durante sus meditaciones en el desierto por cuarenta días y cuarenta noches, gana importancia relevante y muy actual. De cualquier manera, esta contienda entre el mundo exterior y su interior está propensa a precipitarse en un futuro muy próximo. La integración de ambos mundos como siendo uno complemento del otro es algo que irá sucediéndose paulatinamente. Los acontecimientos por los que nuestras sociedades están atravesando en el presente, son sólo medidas de ajuste entre estas dos fuerzas para llegar a integrarse de manera fluida y rica. Lo externo y lo interno no dejan de ser dos faces de una realidad muchísimo más amplia y mayor. La primera es sólo la manifestación de la segunda. Ambas, por consiguiente, son opulentas, ricas y llenas de posibilidades rebosantes de colores, tamaños y formas, y se extienden mucho más allá de una simple percepción tridimensional.





domingo, 1 de junio de 2008

Vida humana antes de lo imaginado

La Paz Efe y Anf

Un grupo de investigadores de Bolivia anunció hoy el hallazgo cerca del Lago Titicaca de lo que consideran la "huella humana" más antigua del mundo, un descubrimiento que niega la teoría sobre la evolución del hombre y que probaría "la existencia de otras humanidades" anteriores a la actual. Los investigadores, encabezados por Jorge Miranda y Freddy Arce, presentaron la sorprendente teoría en una rueda de prensa en el Ministerio de Exteriores ante otros especialistas y embajadores a los que pidieron ayuda para someter el hallazgo a opiniones de expertos internacionales. La "trascendencia de este descubrimiento es que América estuvo habitada desde épocas remotas", puntualiza Freddy Arce, Director Ejecutivo del Centro de Investigación de tecnología Integral (INTI) y miembro de Wiñáytaypiqala. Se trata de una huella en una roca arenisca de un pie izquierdo de 29,5 centímetros, que habría correspondido a un humano de 1,70 metros de altura, con un peso de 70 kilos, que caminaba erguido, según dijo Arce. Los investigadores deducen que esa huella humana es la más antigua del mundo porque se encuentra en una roca de la edad terciaria, época del mioceno (de 23 a 6 millones de años) y, a su juicio, no fue labrada posteriormente. La huella "tendría una antigüedad entre 5 y 15 millones", lo que probaría "la existencia de una humanidad anterior" a la actual, a la que se le atribuyen como unos dos millones de años de antigüedad. "La teoría de la evolución entonces quedaría en una gran dificultad con la evidencia que ahora estamos mostrando", apuntó. La roca se encuentra cerca de la localidad aimara de Sullkatiti, donde es objeto de culto porque los habitantes de la zona consideran que es una huella de sus antepasados, popularmente conocida como la "pisada del inca". Señalaron que la noticia del descubrimiento fue comunicada a expertos europeos, a los que no identificaron, pero a quienes también han pedido ayuda para corroborar sus investigaciones con otros métodos. "Nos preguntaron si sabíamos el significado de lo que estábamos proponiendo", comentó Miranda al referirse al escepticismo de los investigadores europeos, a los que ahora invita a visitar la zona para someter el hallazgo a las pruebas científicas que sean necesarias.

Según Arce, también han pedido ayuda a diplomáticos egipcios para que el investigador Zahi Hawass conozca las primeras conclusiones de los bolivianos y se pronuncie sobre ellas. El motivo de recurrir a este experto obedece, según Arce y Miranda, a que en agosto del 2007 un grupo de arqueólogos egipcios anunciaron el descubrimiento de una huella humana con una antigüedad supuesta de dos millones de años y que, en su momento, fue destacada como un gran descubrimiento por Hawass. "Vamos a tener que re-escribir, porque ninguna de estas teorías hablan que el hombre ha estado hace quince millones de años en el mundo, ni siquiera en cinco millones de años, la huella más antigua que se tiene es de dos millones de años en Egipto", remarca Manuel de la Torre, otro miembro de la Comunidad. Sin embargo, para establecer la data de la pisada se requiere "hacer análisis más profundos y especializados", puntualiza Jorge Miranda al invitar a los científicos del país y del mundo a aportar en estas investigaciones. Los investigadores, asociados en la denominada "Comunidad de la sabiduría ancestral", dijo que prepararán para los próximos días una expedición al lugar para presentar a la prensa la roca, que ha sido cercada para protegerla, ya que los comuneros del lugar impiden que sea trasladada a La Paz.

El descubrimiento de este vestigio es puesto en consideración de la colectividad científica nacional e internacional por la "Comunidad de la Sabiduría Ancestral", puntualizó Arce "Como investigadores nos interesa la parte científica, que ellos vengan y comprueben que estamos descubriendo y después veremos qué pasa con los dogmas religiosos", añadió de la Torre. "Todavía hay que seguir trabajando", puntualizó Arce en la presentación realizada en la Cancillería. En tanto que Miranda invitó a los investigadores de las distintas áreas para ahondar las pesquisas y establecer la antigüedad de esta huella. Entre los estudios que deben realizarse está la "datación radiocarbónica para ver si realmente la huella corresponde a la época en que la piedra era como barro", explicó De la Torre al puntualizar que ese análisis "es básico para determinar exactamente su antigüedad". La otra tarea está relacionada con la extracción de los estratos que están cubriendo la piedra, puesto que "puede que más abajo hayan más" vestigios, pero esta tarea demanda un "sistema científico muy bien hecho para que no se vaya a romper la piedra". Este descubrimiento y la presentación a la comunidad científica tiene el propósito de hacer público el hallazgo y dar pie a investigaciones más profundas, remarcó Miranda. A 4.027 metros de altura El vestigio de ser humano más antiguo, conocido como "la pisada del Inka", fue ubicado en la cima de Lawaqullu, que traducido al español significa "cerro de arenisca", explicó Miranda, en tanto que Arce reveló que fue encontrado a 4.027 metros de altura sobre el nivel del mar. Este cerro está ubicado en la localidad de Sullkatiti Lawaqullu, del municipio de Jesús de Machaqa, en la zona de influencia de Tiahuanaku, en la provincia Ingavi de La Paz, explican los investigadores al indicar que esta área en el período del Mioceno, hace millones de años, era un mar. La pisada humana está ubicada a una distancia de 120 a 130 kilómetros desde la ciudad de La Paz, en las cercanías del lago Titikaka, de acuerdo con los cálculos realizados por los investigadores adscritos a la Unidad Nacional de Arqueología (UNAR).

Fuente:
www.lostiempos.com/noticias/30-05-08/vida_y_futuro.php

Paúl Gabriel comenta: Estaré atento a las repercusiones internacionales que este fantástico descubrimiento pueda generar, en especial por los moldes rígidos establecidos en los círculos científicos. De cualquier manera, vivimos tiempos mágicos e increíbles, y la realidad que comenzamos a percibir en esta nuestra actualidad nos lo está demostrando paso a paso...

martes, 27 de mayo de 2008

MAGIA

No es sólo un acto, un rito, una acción, una fórmula. Es sobretodo un sentimiento, una energía profunda, una alquimia que nace primigeniamente en el interior, crece y se desarrolla hasta transmutarse en materia, situación o experiencia. Se encuentra en todos el potencial de desarrollar las habilidades que requiere su manejo; un manejo que muchos acceden sin saberlo del todo. La palabra, la concentración, la persistencia son mecanismos poderosos de manifestación, claro, que sin una fuerte directriz emocional y sentimental pueden llegar a ser vanos e intrascendentes. Pueden haber altibajos constantes en su realización, pues requiere práctica, también paciencia. Mucho más que eso: responsabilidad. El ser humano es un ser mágico, capaz de despertar fuerzas ígneas encerradas y escondidas atrás de las nubosidades de la razón y la lógica. La historia del ser humano ha sido cuajada de dudas, malestares y tergiversaciones sobre sí mismo y su semejante, para sedar su proceder natural y coartar la maravillosa energía que carga dentro. Las dudas y los temores ancestrales e históricos, por el contrario, lo han impulsado a descargar otro tipo de manifestaciones a su alrededor, como una máscara que le seduce y acaricia a diario los velos de la mente. Muchos hombres y mujeres de la actualidad están seducidos por la magia de lo causal, por los artificios de la seducción pura, por la contemplación y el éxtasis de lo “real”. Lo “real” se toca, se percibe, se huele, se escucha, dirán muchos (los sueños son muy parecidos). Esto sólo demuestra la magia de los magos modernos. El poder que sus manifestaciones han llegado a ejercer en muchos; y muchos son los que piensan que la magia no les favorece y no hace parte de su día a día. No obstante, la magia es la esencia de todos los días. El sabor, en sí, radica en la propia manifestación, el no idolatrar ni seguir reglas ajenas para aplicarlas a uno mismo. Esto es poder. Haz la prueba práctica de tu magia personal. Simplemente, escucha tus propias palabras y el efecto que ellas tienen cuando llegan al corazón de quien te escucha. Tu puedes ser capaz de causar buena impresión, hacer reír a alguien, puedes hacer llorar si así lo deseas. Herir es fácil. Lo puedes hacer con un simple pensamiento, un gesto o una palabra ruda y eso bien lo sabes. Una mirada puede ser inolvidable. Tu entusiasmo puede hacer encaminar a otros en alguna labor embriagante. Cuando deseas algo con tesón, lo alcanzas y cuando tienes una mala impresión de ti mismo/a, siempre hallarás a las personas y situaciones que se acomoden a tal visión. Eso es magia. Lo practicas a diario. Es poderoso y por eso también reconoces las consecuencias. Son justo esas consecuencias las que acabas sintiendo bien allí en el corazón, ellas pueden hincharlo de gozo o todo lo contrario. Sea como fuere, cabe a ti usar tu magia como mejor dispongas.

viernes, 23 de mayo de 2008

Creación Consciente

La idea surge como acto de necesidad. Entre tantas lúdicas manifestaciones noticiosas y otras en general, situaciones de miseria humana, corrupción, desprecio del ser humano y su entorno, vandalismo, actos patológicos del comportamiento, depresiones, drogadicción, suicidios, una cadena interminable de sinsabores, traiciones amorosas y otras no tanto... Bien, en síntesis, todo un repertorio creativo salido de las fauces del único creador capaz de haber dado vida a tanta desesperanza. Así, como el ser humano se crea a si mismo desasosiego, es igualmente capaz de concentrar sus energías en tareas alentadoras y plenas de inspiración. El trabajo presente tiene ese postulado. Como un medio de información que representa, el fin es servir de lupa para aquellos acontecimientos y quehaceres diarios, que a la vez contienen una importancia poderosa en nuestro subconsciente individual y colectivo. Sin embargo, la seducción por lo amargo ha llegado a substituir lo dulce. Mentira. No lo ha hecho. Lo dulce siempre ha existido, existe y no porque el hombre escoja lo amargo, lo dulce tendrá que desvanecer.

Este lugar está dedicado a todos aquellos que creen en la majestuosa fuerza de si mismos. No nos referimos al ego, ese rufián, nos referimos a la irrenunciable determinación de intentar ver el Lotus en el lodazal, de respirar en medio de una nube de gases tóxicos, de percibir la divinidad ahí donde los insultos y las malas palabras abundan. En sí, en creer en sueños y milagros cuando nos dicen que es ilógico e imposible, cuando nos dicen que la única realidad plausible es aquella que debemos soportar a diario con nuestros cinco limitados sentidos, y lo único que queda es resignarnos. Mentira. Este emprendimiento es para todos aquellos que sueñan, pero a la vez tienen ganas de transformar todos esos sueños en realidad a través de sus acciones.¿Acaso que no es para eso que vinimos y vivimos? Entonces, alguien dirá: “¿Eres ciego?” A aquellos les responderemos que de todo lo viejo ya hemos tenido bastante y estamos exhaustos. Ahora decidimos abrir los ojos a mundos nuevos y, como creadores conscientes que somos, nuestro objetivo es crear las situaciones adecuadas para vivenciar lo que queremos, no lo contrario. Así, todo se trata de redirigir nuestro tele-objetivo, de ahorrar nuestras energías para poder construir nuestros sueños más sublimes y no despilfarrarlas en dramas o menudencias de tal o cual tipo, a no ser que realmente lo queramos. “Pero es una tarea imposible”, algunos dirán. Bien, paremos ahí y no lo intentemos. Mentira. Lo intentaremos con todas las benditas ganas. De eso se trata Creación Consciente.

Los seres humanos hemos gastado ingentes cantidades de energía a lo largo de nuestra historia para crear nuestro gran circo de melodramas, que intentar aceptar otro tipo de circunstancias es intrépido y arriesgado. Caramba! Ha costado tanto dolor, sufrimiento y sangre haber construido esta sociedad con sus intrincados detalles. Evidentemente, es un acto de creadores y muy creativos, por cierto. Sin embargo, el juego no necesariamente tiene que ser penoso y tan complicado. Simplemente, no lo es. Todo depende de los desafíos y creencias que optamos por seguir. De eso se trata, de ser completamente conscientes de los desafíos que encaramos en el curso de nuestras cortas vidas, y aceptar el reto y el rol que hemos decidido jugar en el tablero de la vida. Nada tiene que ver con ser víctimas de situaciones ajenas e inefables que escapan dolorosamente de nuestras frágiles y humanas condiciones; y todo es culpa de Dios, del diablo, de las multinacionales, del gobierno, de la sociedad, del vecino, del amigo y del enemigo... Mentira, es hora de apartar los velos y tomar responsabilidad de cada uno de nuestros actos. Es un experimento. Vivir es un gran experimento. De eso se trata Creación Consciente, de ser capaces de crear conscientemente nuevas soluciones, de acariciar nuevas vivencias que prueben nuestras habilidades humanas, muchas de ellas escondidas en la desconfianza y la ironía individuales. Para ello, el conocimiento es un imperativo. El estudio y la vivencia nos otorgan conocimiento, por eso debe ser preponderante arrojarnos a sus brazos. Claro que miles de libros, sin duda, nos ayudarán a vivir, pero nos mostrarán de cualquier forma, un sucinto camino a seguir. No podemos inventar reglas y fórmulas, porque eso es continuar hundiéndonos en nuestras arcaicas y pendencieras formas de pensar y actuar. El propósito es tener amplia libertad de maniobra para superar nuestros retos (otros hablarán de continuas carencias), y para aprender a superarlas es a través del ejercicio de la vida, experimentando, levantando las anclas que nos tienen presos a formas-pensamientos caducos, pues como creadores que somos ya hemos experimentado centenas de veces lo que debíamos en su momento. Lo hemos hecho por voluntad propia. Es tiempo de alzar la vista por encima de la línea del horizonte y dejar que las olas y el viento lleven nuestro barco hacia territorios desconocidos y, quizá, largamente esperados.


Un abrazo a todos.








Madre Tierra

Madre Tierra
Foto de laTierra tomada desde la sonda japonesa Moon Orbiter Kaguya

Electric Storm

.......... En Marzo 02 de 2014, primera noche de Carnaval se derrama el cielo sobre la ciudad de Santa cruz de la Sierra, Bolivia. Estas imágenes pueden servir como un pequeño testimonio de lo que ocurrió.................. ...................................................... ...................................................... On March 2, 2014, on the first day of Carnival, it pours rain all over the city of Santa Cruz de la Sierra, in Bolivia. This footage may serve as a short testimony of what happened... Para facilitar su subida a Internet, la calidad de imágen se ha reducido notablemente. Espero lo disfruten!

Colores

..........................Tercer segmenro de "En el Cielo y en la Tierra"...........