Este primer cuarto de año ha dado paso a muchas metáforas particulares y grupales. Cada acontecimiento que se ha suscitado y suscita no deja de ser una información metafórica de cómo las circunstancias vivenciales internas y externas se compatibilizan para entablar un diálogo entre ellas, un lazo de comunicación que nos permita decodificar mejor nuestro devenir personal y como especie, en el océano de nuestra increíble existencia.
Las oportunidades para entablar ese lazo comunicativo son permanentes y ha sido a través de estos escritos que de alguna manera intento mostrar estos hilos conductores que nos atrapan y nos distinguen como seres vivos. Ahora, escribiendo el presente artículo me ha venido de manera fuerte el concepto de la réplica, la réplica como un artilugio mimético de una entidad que desde hace tiempo ha estado entre nosotros infiltrándose en nuestro ambiente, influenciando nuestros pensamientos e infraestructura emocional, "replicándose" e intentando intervenir en nuestros actos cognitivos y "orgánicos". Y antes de escribir estas líneas me he deparado con la información que refiere a dispositivos de muy avanzada tecnología capaces de vincular el cerebro de billones de personas a una computadora. Todo lo que imaginemos es posible y está al alcance de aquellos que manejan los millones financieros necesarios para alcanzar sus fines últimos. Pero así, como la preocupación me embargó, llegó de igual forma la respuesta clara que se sobrepuso al absurdo. En una realidad que en si alberga muchas otras, al final vamos construyendo conjuntamente los laberintos, pero al mismo tiempo, las salidas al nudo energético que en estos momentos converge en el planeta Tierra. Muchas cosas no son simplemente de "humanos". Por cierto, fuerzas extrahumanas siempre han deseado desestabilizar al habitante de este plano y despojarlo de su "humanidad", creando desarmonía constante y desarraigando a las almas terrestres de su sentimiento de pertenencia y permanencia planetaria. Muchos simplemente han pedido volver a sus lugares de origen en alguna estrella distante. Las entidades del desajuste, por el contrario, han estado intentando hacer de nuestro planeta su lugar de orígen, secuestrando y alterando la frecuencia que este plano de existencia alberga. No por nada tanta inversión en la destrucción, contaminación, bloqueo de energía libre, caos y abuso planeados, además de tecnología cuya función es llegar a crear "un abismo" con el más allá. Por lo menos así lo muestran, colocando al dios Hindú Shiva como emblema de su proyecto "divino" (los interesados en adentrarse en CERN harán sus propias búsquedas y conjeturas al respecto, pues es necesario disCERNir cuando hay mucho más que subyace bajo la superficie).
Informar este tipo de interferencias y anomalías que abundan en nuestra realidad ha sido muchas veces un asunto frustrante, y en muchos casos se nos dice que la gente no está preparada -una de las tantas anomalías que se nos hace creer permanentemente-. En este sentido,algo que hemos estado evidenciando en estos últimos veinte años es el acercamiento de la ciencia con su supuesta contraparte: "el espíritu", transformándose en la actualidad en una pseudo religión que ha venido a denominarse de "nueva era". Haber traido la "ciencia" más cerca del místicismo ha hecho con que muchos alberguen ahora sus esperanzas en un "dios" visible y computable y, ¿por qué no decirlo?, algo que pueda ser manejable y controlable a través de poderosos ciclotrones y computadoras cuánticas, de acuerdo a la voluntad de estas "entidades". El propio Stephen Hawking ya expresó su preocupación al respecto, al igual que una larga lista de científicos de renombre mundial. A aquellos que lean estas estrofas y comiencen a reclamar de nuestro análisis, sólo puedo decirles que aquí no hay ningún reclamo contra "la ciencia", aquella que indaga la verdad o verdades que rigen nuestro universo, pues de eso trata nuestra estadía en este plano: el autodescubrirnos. La "ciencia" a la que hago mención es la que ha encubierto desde hace mucho tiempo las verdades que nos rodean y en su lugar ha insertado una serie de creencias bien hilvanadas, creando un circulo vicioso de respuestas incompletas y anomalías incesantes. De esta forma, se puede decir que vivimos en una realidad de creencias implantadas y, el esfuerzo que presenciamos por parte del "status quo" ,que ha regido este plano de existencia por miles y miles de años, es monumental, todo a expensas de la energía vital de los habitantes que aquí se encuentran, representados en sus más diversas formas orgánicas e inorgánicas.
Así, la infiltración, copia e implantación acaban siendo requisitos para la apropiación de una realidad natural, y a la que se hace permanente mención en este blog. No es un acaso, entonces, que veamos las repercusiones de tal especie de "realidad viral" que se replica en nuestro día a día: la copia en sus múltiples formatos acaba siendo un indicio del deseo de "desarrollo" destacable. El conquistador usurpa una realidad viva y metódicamente suplanta el pensamiento y la cultura viva a través de símbolos sintéticos (como un gran ejemplo tenemos el dinero, si lo vemos por el lado meramente técnico, es un simple pedazo de papel con una impresión numérica; un pedazo de papel impreso cuyo valor de impresión es realmente infimo en relación al tamaño simbólico que ha ganado en nuestra imaginación colectiva). Por ese símbolo imaginario se perpetran cuantiosas iniquidades.
La implantación y copia simbólica se transmite realmente de manera poderosa a través de los canales de televisión. No es por nada que los "programas" tengan esa denominación, pues hacen parte de la "programación" sistemática de los televidentes; "programas" solventados para infiltrarse en la mente personal y grupal a través de la implantación de "modelos" que tienen la misión de ser copiados, en especial, por adolescentes y jóvenes que recién están descubriendo el juego en el que están comenzando a moverse...
Si aquí me refiero a un virus, debo también referirme al antídoto. De cierto, si seguimos analisando este tema desde todas las perspectivas, llegaremos en algún momento a la noción de que el planeta Tierra es el espacio que nos alberga para dar solución a un dilema que no es solo de tamaño terrestre, sino sideral. Este lugar, donde convergimos ahora todos los terráqueos y hasta no terráqueos, simboliza el epítome de las luchas y desaveniencias del dualismo a escala universal, las luchas intestinas entre polaridades en este Universo que batalla por su equilibrio.
De igual forma, si hago referencia a una respuesta clara que hace tambalear mi preocupación, es el hecho de que existan muchas fuerzas en juego, cada una trabajando en conjunto para restablecer el balance referido. La Tierra tiene sus planes de sobrevivencia. A cada uno se le ha dado el poder de crear su realidad a pesar de los embates y supresiones energéticas que todos nos hemos visto envueltos en algún momento. Y de allí ha emanado el antídoto, de la fuerza de muchos humanos que han pasado por sus procesos íntimos de regeneración a pesar de todos las presiones físicas y psicológicas por las que hayan pasado. Esta revelación interna es lo que ha venido a llamarse de "despertar". Los ejemplos de tal acontecimiento sobran y se harán más evidentes día a día, a medida que se vaya ganando mayor masa crítica alrededor del planeta. No tiene que ver del todo con asuntos de ADN humano, al que se increpa constantemente por este tipo de cambios psicofisiológicos, pues la Conciencia no se sustrae simplemente a un parangón biológico, en especial, con atributos que han sido manejados a diestra y siniestra por entidades de todos los tipos a lo largo de millones de años, en una especie de mercado genético de proporciones cósmicas. Hablar de diferentes dimensiones y ascenciones del espíritu es un asunto lúdico, pues el Alma como tal es UNA en cualquier dimensión. Aquí vemos todo un juego programático en el que se nos quiere hacer creer que el más apto es capaz de ascender al siguiente nivel en una especie de carrera de ratones.
No quiero hablar de acontecimientos puntuales que están suscitándose en todas partes (erupción del volcán Calbuco en Chile este miércoles 22 de Abril y terremoto en Nepal Sábado 25 de Abril), ya que cada uno posee una interpretación particular de ellos con relación a su entendimiento y experiencias, y eso es lo que este blog desea promover y motivar en el lector: no dejarse abrumar por situaciones externas aparentemente incontrolables, cuando en realidad cada uno pasa por sus propias vivencias, únicas, de acuerdo al pensamiento y energía que la persona esté abrazando en ese momento. Es claro que el sufrimiento ajeno, no es ajeno -lo repetimos a menudo-, pues hacemos todos parte de una red fascinante y compleja de vida, de la que todos participamos. Este blog constantemente toca el tema de la Empatía, un atributo de todo ser vivo que se quiere desterrar de este plano, a través de una permanente insensibilización del caracter, para facilitar el accionar de las "fuerzas parasitarias" que hemos venido mencionando varias veces. Percibir las injusticias y las desgracias en general como siendo algo "normal" es parte de ese plan.
No existen las fórmulas del éxito ni de la felicidad. De hecho, no se las puede aplicar de la misma manera a todos. Para muchos, esas fórmulas como tal han ganado una connotación mercantilista que se acerca más a un individualismo extremo y no circunscribe a su proyecto un matiz de satisfacción grupal. El éxito, en el momento crítico que atravesamos como especie y planeta, debe orientarse a nuestra sobrevivencia colectiva, y de qué manera canalicemos nuestra Creación Interna hacia esta Realidad que necesita cada vez más aire puro y bien oxigenado y una buena dósis de Equilibrio. Consecuentemente, estaremos siendo exitosos si con tenacidad nos vamos despojando y limpiando personal y colectivamente de todas esas fuerzas que quieren "implantar" una realidad ajena a nuestra naturaleza. Podemos comenzar con los quehaceres de nuestro día a día, observando a qué o quien otorgamos gran parte de nuestra Fuerza Vital.
¡Un Gran Abrazo a Todos!
Así, la infiltración, copia e implantación acaban siendo requisitos para la apropiación de una realidad natural, y a la que se hace permanente mención en este blog. No es un acaso, entonces, que veamos las repercusiones de tal especie de "realidad viral" que se replica en nuestro día a día: la copia en sus múltiples formatos acaba siendo un indicio del deseo de "desarrollo" destacable. El conquistador usurpa una realidad viva y metódicamente suplanta el pensamiento y la cultura viva a través de símbolos sintéticos (como un gran ejemplo tenemos el dinero, si lo vemos por el lado meramente técnico, es un simple pedazo de papel con una impresión numérica; un pedazo de papel impreso cuyo valor de impresión es realmente infimo en relación al tamaño simbólico que ha ganado en nuestra imaginación colectiva). Por ese símbolo imaginario se perpetran cuantiosas iniquidades.
La implantación y copia simbólica se transmite realmente de manera poderosa a través de los canales de televisión. No es por nada que los "programas" tengan esa denominación, pues hacen parte de la "programación" sistemática de los televidentes; "programas" solventados para infiltrarse en la mente personal y grupal a través de la implantación de "modelos" que tienen la misión de ser copiados, en especial, por adolescentes y jóvenes que recién están descubriendo el juego en el que están comenzando a moverse...
Si aquí me refiero a un virus, debo también referirme al antídoto. De cierto, si seguimos analisando este tema desde todas las perspectivas, llegaremos en algún momento a la noción de que el planeta Tierra es el espacio que nos alberga para dar solución a un dilema que no es solo de tamaño terrestre, sino sideral. Este lugar, donde convergimos ahora todos los terráqueos y hasta no terráqueos, simboliza el epítome de las luchas y desaveniencias del dualismo a escala universal, las luchas intestinas entre polaridades en este Universo que batalla por su equilibrio.
De igual forma, si hago referencia a una respuesta clara que hace tambalear mi preocupación, es el hecho de que existan muchas fuerzas en juego, cada una trabajando en conjunto para restablecer el balance referido. La Tierra tiene sus planes de sobrevivencia. A cada uno se le ha dado el poder de crear su realidad a pesar de los embates y supresiones energéticas que todos nos hemos visto envueltos en algún momento. Y de allí ha emanado el antídoto, de la fuerza de muchos humanos que han pasado por sus procesos íntimos de regeneración a pesar de todos las presiones físicas y psicológicas por las que hayan pasado. Esta revelación interna es lo que ha venido a llamarse de "despertar". Los ejemplos de tal acontecimiento sobran y se harán más evidentes día a día, a medida que se vaya ganando mayor masa crítica alrededor del planeta. No tiene que ver del todo con asuntos de ADN humano, al que se increpa constantemente por este tipo de cambios psicofisiológicos, pues la Conciencia no se sustrae simplemente a un parangón biológico, en especial, con atributos que han sido manejados a diestra y siniestra por entidades de todos los tipos a lo largo de millones de años, en una especie de mercado genético de proporciones cósmicas. Hablar de diferentes dimensiones y ascenciones del espíritu es un asunto lúdico, pues el Alma como tal es UNA en cualquier dimensión. Aquí vemos todo un juego programático en el que se nos quiere hacer creer que el más apto es capaz de ascender al siguiente nivel en una especie de carrera de ratones.
No quiero hablar de acontecimientos puntuales que están suscitándose en todas partes (erupción del volcán Calbuco en Chile este miércoles 22 de Abril y terremoto en Nepal Sábado 25 de Abril), ya que cada uno posee una interpretación particular de ellos con relación a su entendimiento y experiencias, y eso es lo que este blog desea promover y motivar en el lector: no dejarse abrumar por situaciones externas aparentemente incontrolables, cuando en realidad cada uno pasa por sus propias vivencias, únicas, de acuerdo al pensamiento y energía que la persona esté abrazando en ese momento. Es claro que el sufrimiento ajeno, no es ajeno -lo repetimos a menudo-, pues hacemos todos parte de una red fascinante y compleja de vida, de la que todos participamos. Este blog constantemente toca el tema de la Empatía, un atributo de todo ser vivo que se quiere desterrar de este plano, a través de una permanente insensibilización del caracter, para facilitar el accionar de las "fuerzas parasitarias" que hemos venido mencionando varias veces. Percibir las injusticias y las desgracias en general como siendo algo "normal" es parte de ese plan.
No existen las fórmulas del éxito ni de la felicidad. De hecho, no se las puede aplicar de la misma manera a todos. Para muchos, esas fórmulas como tal han ganado una connotación mercantilista que se acerca más a un individualismo extremo y no circunscribe a su proyecto un matiz de satisfacción grupal. El éxito, en el momento crítico que atravesamos como especie y planeta, debe orientarse a nuestra sobrevivencia colectiva, y de qué manera canalicemos nuestra Creación Interna hacia esta Realidad que necesita cada vez más aire puro y bien oxigenado y una buena dósis de Equilibrio. Consecuentemente, estaremos siendo exitosos si con tenacidad nos vamos despojando y limpiando personal y colectivamente de todas esas fuerzas que quieren "implantar" una realidad ajena a nuestra naturaleza. Podemos comenzar con los quehaceres de nuestro día a día, observando a qué o quien otorgamos gran parte de nuestra Fuerza Vital.
¡Un Gran Abrazo a Todos!
